En 1987 nació Eau Dynamisante y lo hizo gracias a la intuición de Jacques Courtin-Clarins y fue la primera Eau de Toilette que asoció el perfume a la acción tratante de las plantas. Un nuevo concepto inventado por Clarins: el Agua de Tratamiento.
Para aquellas que ya la conocéis es hora de redescubrirla y si no la habéis probado nunca, no dejéis de hacerlo. Pulveriza tu cuerpo tras la ducha matutina y te sentirás llena de energía. Si quieres también puedes usarla antes de acostarte: sus aromas te ayudarán a conciliar el sueño.
Como fragancia aromática destacan los aceites esenciales de naranja, limón, lavanda y pachulí que alivian tensiones, avivan el buen humor y devuelven la energía. Como tratamiento fito-terapéutico destacan los extractos de plantas no odoríferos inspirados por las farmacopeas tradicionales: jengibre, ginseng, aloe, cola de cabello e ispaghul que hidratan, suavizan y reafirman la piel.